14 mayo, 2010

¿Conviene instalar las actualizaciones de Windows?

Autor: Josito
Web: http://www.configurarequipos.com/doc631.html

¿ES CONVENIENTE INSTALAR TODAS LAS ACTUALIZACIONES DE WINDOWS?.

Bueno, esta es una cuestión a la que no se le puede dar una respuesta categórica.

En un principio si que es conveniente instalar todas las actualizaciones de Windows (más que conveniente, yo diría que necesario), pero también es cierto que no todas las actualizaciones tienen la misma importancia.

Las actualizaciones de Windows XP se dividen en varias categorías:

Actualizaciones críticas:
Que suelen ser 'parches' a fallos detectados en el sistema o en los programas que se instalan con él, y que se deben instalar todas.

Actualizaciones de seguridad:
Que son actualizaciones para corregir fallos de seguridad del sistema o de los programas que se instalan con él, y que también se deben instalar todas.

Actualizaciones opcionales o recomendadas:
En este grupo es donde puede entrar alguna actualización que podamos dejar sin instalar, pero solo aquellas que estemos seguros de no necesitar. Entre ellas se encuentran actualizaciones de drivers, por ejemplo.

En Windows Vista cambian algo las definiciones, pero no el espíritu de las mismas.

Actualizaciones importantes y críticas: Que deben instalarse todas. En estas se han encuadrado las actualizaciones de seguridad. Encuadra también este apartado las actualizaciones de definición de Windows Defender.

Actualizaciones recomendadas: Que, al menos de momento, se trata de actualizaciones de mejoras en el desempeño de Windows. Igualmente deben instalarse todas.

Actualizaciones opcionales: Es en este grupo en el que se complica un poco la cosa, ya que bajo el título de Actualizaciones opcionales nos encontramos con una serie de actualizaciones que van desde actualizaciones de controladores hasta los paquetes opcionales de idiomas, así como algunas actualizaciones exclusivas, como es el caso de actualizaciones solo disponibles para algunas versiones de Windows Vista. El sistema de funcionamiento del nuevo Windows Update hace que tan solo nos aparezcan aquellas actualizaciones que pueden afectar a nuestro equipo, por lo que no todas las actualizaciones opcionales, sobre todo las de los controladores, son las mismas para todos los usuarios.

Otra cosa es la forma de cargar estas actualizaciones. Algunas de ellas (sobre todo las actualizaciones críticas y algunas de seguridad) necesitan reiniciar el equipo, por lo que hay ocasiones en las que no resulta conveniente la opción de instalarlas automáticamente. Una buena muestra de esto puede ser cuando uno de nuestros equipos actúe como servidor de datos para otros equipos, lo que hace que debamos ser muy cuidadosos en cuanto a cuando puede reiniciarse y cuando no puede hacerlo.
Probablemente la mejor opción en estos casos sea la de que descargue automáticamente las actualizaciones, pero que no la instale hasta que no las veamos, lo que entre otras cosas nos permite un mayor control tanto sobre las actualizaciones que instalamos como, que también es importante, sobre cuando las instalamos.

Volviendo a la conveniencia o no de instalar las actualizaciones, hay que pensar que estas no están hechas por que sí, sino que cumplen una función muy importante, y es la de corregir los errores que se van detectando con el paso del tiempo así como ir actualizando el sistema a los nuevos dispositivos que van saliendo. Hay que tener en cuenta, por poner solo un ejemplo, que el Windows XP SP2 salió al mercado en agosto de 2.004 (es decir, hace ya tres años), por lo que necesariamente ha tenido que haber en este tiempo actualizaciones parta adaptarlo a nuevos dispositivos. También hay actualizaciones que modifican el comportamiento de algunas funciones, como por ejemplo una actualización habida recientemente, que modifica en algunos países la fecha del cambio del horario de verano al horario de invierno, ya que este cambio se ha modificado en algunas zonas.

En resumen, si queremos mantener nuestro sistema actualizado y lo más protegido posible debemos instalar las actualizaciones (al menos las críticas y las de seguridad en el caso de Windows XP y las importantes y las recomendadas en el caso de Windows Vista). También debemos instalar aquellas actualizaciones opcionales que nos puedan afectar.

Por supuesto que no es imprescindible que tengamos nuestro Windows actualizado, pero esto es solo cierto si no estamos conectado a Internet y si no pensamos actualizar nuestro equipo. Si estamos conectados a Internet o pensamos actualizar nuestro equipo sí que es necesario que lo tengamos con las últimas actualizaciones disponibles instaladas, ya que esto nos puede ahorrar algunos problemas.

Por último recordar que todas las actualizaciones suelen estar disponibles a través del servicio de Windows Update de la Web de Microsoft.

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